Existen varios maneras de adquirir vehículos para conformar la flotilla de tu empresa. En general, son dos los esquemas para ello: la compra y el leasing (arrendamiento puro).
Ahora veamos de entre estos dos esquemas cuál es el que te conviene más:
Compra del vehículo
Sin duda el esquema más común para adquirir las unidades de un flotilla es la compra de los vehículos. Pero, ¿realmente es lo que más nos conviene? Veamos lo siguiente:
- Se devalúan
- No lo puedes renovar, sólo revenderlo
- El costo del enganche es alto
Leasing (arrendamiento puro)
En México el uso del esquema de leasing de autos está creciendo. Esto no es casualidad, se debe a que cada vez más se conocen las ventajas y beneficios que este tipo de arrendamiento representa para las empresa. A continuación revisemos en que consisten:
- Deducción de gastos: Por concepto de arrendamiento, las personas físicas con actividad empresarial, por honorarios y las personas morales pueden deducir hasta 6 mil pesos mensuales por la renta de cada vehículo más todos los servicios que conlleva el arrendamiento.
- No te descapitaliza: A diferencia de la opción de compra a crédito del vehículo, donde por lo menos tienes que pagar el 15% de enganche, mediante el leasing de autos no corres el riesgo de descapitalizarte, ya que sólo pagas una renta de depósito; además, tienes claro desde el inicio el costo total del arrendamiento.
- Tienes la opción de comprar las unidades: Puedes arrendar las unidades para tu flotilla por el tiempo que te convenga: 12, 24, 36 y 48 meses, y si lo deseas, puedes comprar las unidades al finalizar el contrato por un valor residual que va del 50% al 20% de su costo, dependiendo del plazo del arrendamiento.
Ha llegado el momento de elegir el esquema que más que te convenga para crear la flotilla de tu empresa o negocio. Si te interesa conocer más sobre este tema o alguno de nuestros servicios, te invitamos a agendar una asesoría con nuestros expertos.
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